DE DAVID A MARAT


¡A traición!

Así ha muerto hoy mi amigo, al que yo más quería, al que más quería la República.

Hombre como ninguno, vivo espíritu de la Revolución, conquistador y amigo del pueblo, yace ahora en su bañera y sin aliento Jean-Paul Marat.

Supiste ganarte el afecto de muchos de nosotros y el odio de esos otros que ahora te llevan a la tumba. Fuiste para mí un gran amigo, y yo, tu más fiel admirador.

Y por eso, no dejo de lamentarme: ¡qué desgracia tan grande, compañero! De mi mente quiero borrar y no puedo la imagen de la cara confiada que pondrías cuando la viste entrar por la puerta, todavía sin saber lo que te esperaba, lo que ese demonio entre sus pechos guardaba. Y luego, cuando la muy infame sacó su puñal, cómo se te mudaría el rostro, y cómo muy pronto, al clavártelo en tu carne, toda el agua se tornaría roja. ¡Roja como la sangre que todavía se ha de derramar, sangre infame de tu asesina!

¡Ay maldita Corday! A mis ojos cada vez más odiosa, porque te acercaste como amiga, siendo lo que en realidad eras.

Cuando la vi hoy, después de haberte quitado la vida, tan tranquila, tan impasible, sin querer siquiera huir, quise herirla como ella a ti, pero me detuve, porque ya sé lo que le espera: la guillotina.

Pero ni eso me consuela, amigo. Sólo pienso en la injusticia cometida, en que a estas horas no deberías estar muerto, sino vivo y en mi casa, donde solíamos encontrarnos todas las tardes. Ya no habrá más confidencias, ni más risas, ni más bromas, ni tendré mejor amigo en los días que me sobran.

Pero has muerto como un mártir –de la Libertad, de la Patria, del Pueblo-, y en la memoria de todos quedarás. Serás recordado como un héroe y ella, tu cruel verdugo, como la más detestable de todas las criaturas.

Y como mi único talento es pintar, quiero pintarte así, víctima de la más despreciable traición, pero tan grande y tan magnífico como en verdad eras. De manera que al verte digamos con orgullo y la cabeza bien alta:

¡Viva Francia! ¡Viva la Revolución! ¡Y viva Marat!



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Pintura: "Muerte de Marat", de Jacques-Luis David.

Texto: Esperanza


2 comentarios:

இலை Bohemia இலை dijo...

No conocía ese cuadro y es impresinante!!!!!

BSS

Esperanza dijo...

A mí me parece lo mismo, Bohemia; me acuerdo de que cuando lo estudiamos en clase me quedé también muy impresionada...

La iluminación de lado, como en los cuadros de Caravaggio (dicen que David quiso pintarlo así, como si fuera uno de los mártires o santos que en sus cuadros pintaba Caravaggio), junto con el gesto de abandono de Marat en su bañera, le da un dramatismo muy intenso a la escena, que hace que una vez que la ves, sea imposible olvidarla.

Este cuadro es increíble, simplemente.

Olvídate de fechas, de etapas, de etiquetas.

Mira. Lee. Disfruta.

Vive el arte por el arte.